Por Sergio Acevedo
La victoria espectacular del doctor Waldo Ariel Suero, en las elecciones celebradas en el Colegio Médico Dominicano, constituye una convalidación a la política implementada por Quique Antùn, en el sentido de abrirle las puertas del PRSC a todo el espectro social nacional, para que entre todos, no solo construyamos el nuevo partido, sino también, desarrollemos el instrumento de lucha para eliminar las desigualdades que nos abate como nación.
Waldo Suero, prominente especialista de cardiología y pediatría, ha sido también un activo dirigente gremial que ha dedicado todas sus energías a la lucha por las reivindicaciones de los profesionales de la salud, así como a las sentidas demandas de la población por mejorar sus niveles de vida y por la vigencia de sus derechos.
En esta ocasión, en la cual ocupa por cuarta vez la presidencia del Colegio Médico, Waldo, quien ostenta el cargo de Secretario Nacional de Salud del PRSC, obtuvo una votación descomunal por encima del 70% de los sufragantes, lo que revela su inmenso liderazgo y una legitimidad formidable para encausar la lucha por mejorar las condiciones de los médicos y del país.
Estamos en presencia de un gremialista experto, popular; un hombre de luces prominentes, sensible ante el drama de su clase y del país. No se trata de un sindicalista que disfraza sus apetencias de riqueza en la lucha clasista, estamos en presencia del más notable exponente del gremialismo existencial que no busca nada en su provecho, sino que es capaz de los más grandes sacrificios en aras de la mejoría de su clase y de su país.
Siendo un líder de reconocida dimensión nacional como trabajador social, no se limita a una acción anarcosindicalista como la derivada de esa
corriente desde los finales del XIX, su figura emerge desde una concepción diversa pero esencialmente democrática, institucionalista, buscando modificar el cuadro de injusticia capitalista que nos conduce a una vida miserable, profundamente injusta y criminal, que condena a la mayoría de la humanidad a una vida insalubre, desnutrida y enferma.
En sintonía con el pensamiento de nuestro líder, Quique Antùn, el nuevo presidente del CMD se prepara para las grandes jornadas reivindicativas que lo convocan, porque en ningún momento de nuestra historia la situación de salud de nuestro país ha estado transitando por momentos de tanta precariedad.
La lucha en favor de los médicos es impostergable, porque es penoso y lamentable el cuadro existente debido al deterioro de los servicios de salud a causas de fallas estructurales en el diseño de política pública, lo que afecta de manera singular a la masa pobre y a los trabajadores de la salud.
El ejercicio público de la medicina somete a los médicos al hambre y la miseria, debido a los bajos salarios que reciben y la falta de incentivos para vivir una vida digna como corresponde a un profesional de tanta significación social, junto a los demás trabajadores de la salud que sufren las mismas precariedades.
La falta de medicamentos y el deterioro de los equipos, hacen que los hospitales del sector público luzcan como verdaderos almacenes de enfermos, porque debido a esa precariedad han surgido varias enfermedades que han afectado a nuestra población y han producido innumerables muertes.
Un problema sanitario que nos afecta y que es culpa directa de las autoridades, de esa autoridad que improvisa en materia de salud, que carece de una política de salud y de los instrumentos para atender a la población enferma, mientras gasta los recursos alegremente en asuntos no prioritarios, como es la burocracia política que lo soporta.
Existe una unidad de propósito entre el nuevo presidente del CMD y el líder de nuestro partido en cuanto a la situación de la salud y los
trabajadores del ramo, así como de la lucha que estamos emprendiendo para hacer de esta sociedad un conglomerado de personas que disfruten a plenitud de la riqueza que todos producimos, sin exclusiones de ningún género, esto es, de un verdadero estado de derecho en el cual el bienestar sea disfrutado por todos. Muchos éxitos a Waldo en esa gran tarea que le ha deparado la historia por la liberación de su clase.
El reconocido profesional de la medicina dijo que por causa de esa desigualdad, la población vive en un estado de tensión, para agregar que la pobreza en el país está por el orden de un 41%, y la extrema pobreza supera el 10%, y proclamó que hace apenas una década la pobreza estaba en 32%, lo que revela el nivel de aumento de los índices de indigencia.
Proclamó que esa situación es producto de la gran desigualdad social que ha generado ese crecimiento económico desigual, siendo la causante de la violencia que se da en el seno de la sociedad, “la violencia en la familia, la violencia de género”, lo que exige la actuación de los políticos para mitigar y resolver esa gran desigualdad social.
Debe ser una broma esta información. El PRSC sobre todo su presidente, Quique Antún nunca lo apoyaron. No solo eso sino que el mismo Sergio Cedeño, asistente de Quique, ofendió la memoria de la madre del Dr. Suero y se reunió con otros candidatos para apoyarlos en contra de W. Suero, así que de que vienen ahora a vanagloriarse? Esa victoria es de Waldo Suero y los médicos!